Balneario en la India

-Tras preguntar en el comedor a la mujer si cocinaban mi comida favorita, la soba, y que me dijeran que sí, aunque no era normal pedir en India tal plato, me retiré a mi habitación donde me puse la típica toga que se lleva antes de entrar en los balnearios-

Me daré un baño tranquilamente y me iré a cenar.

-Esto lo decía mientras recorría el pasillo que daba a los vestidores de hombres-

Anciano: Disculpe señorita, el vestidor de mujeres está en el otro pasillo -decía con una voz bastante apagada y a la vez lasciva-

Grrr.....¿!se-ño-ri-ta!? -Mi cara se convirtió en la del mismísimo diablo al ver que me confundieron de nuevo con una mujer (en ese momento mi pelo estaba suelto, sin cordón para la coleta) y tras tal osadía saqué de la espalda de mi toga la mugen mientras mi mirada asesina se dirigía contra el pobre abuelo que salió huyendo-

Tsk...maldito viejo. -Me guardé de nuevo la Mugen y entré en los probadores, dejando toda mi ropa en uno de los cestos que había, aunque por un momento se me pasó por la cabeza la posibilidad de encontrar a algún conocido, ya que era demasiado bonito todo esto para ser cierto.En fin, salí hacia los baños con una toalla rodeándome la cintura y me metí dentro de los baños, en una de las esquinas que emanaban tranquilidad y me sumergí hasta que mis ojos tocaban el agua caliente-