|| Vizard (仮面の軍勢, vaizādo) ||
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|| Vizard (仮面の軍勢, vaizādo) ||
Los Vizard (仮面の軍勢, vaizādo), también conocidos como Soldados enmascarados, son un grupo de Segundos Exorcistas o Exorcistas que han obtenido poderes de Akuma. Proviene de una palabra inglesa, derivada de las viseras protectoras en los cascos medievales.
Para usar sus poderes de Akuma hacen surgir una máscara de hueso representativo a l Akuma interno de cada persona, del cual los Vizard mantienen un compelto control sobre éste. Estando con la máscara son capaces de usar técnicas de Akuma como lanzamiento de Balas, y habilidades de Akuma de nivel dos y tres y ser mucho más fuertes que un Akuma ordinario.
El hecho de combinar dos espíritus que son opuestos hace que los límites del poder sean mucho mayores. Sin embargo, la manera de obtener este poder es mucho más complicada que siendo un Akuma real. Al ser necesario vencer a su parte de Akuma en el mundo interior de los Ninja o Exorcistas o Segundos Exorcistas, si se pierde, el aspirante se convertirá en Akuma al tomar esta parte el control. Para poder mantener la máscara, y con ella el poder del Akuma, es necesario pasar un entrenamiento.
Poderes y Habilidades
* Máscara Akuma: Los Vizard permanecen en completo control mientras usan sus máscaras. La fusión de las dos entidades espirituales permite a los Vizard llegar a niveles de potencia muy superior a los de cualquier Akuma, Ninja, Exorcista o Segundo Exorcista común. El uso de sus poderes Akuma se muestra en un aumento de su capacidad de lucha:
* Una mayor velocidad
* Mayor Poder Espiritual (reiatsu)
* Mayor Resistencia
* Aumento de la fuerza
* Tecnicas Akuma: Los Vizard tienen acceso a ciertas habilidades Akuma, y otras adicionales como lo son:
- Negación (反膜(ネガシオン), negashion, literalmente "Membrana de Rechazo") es una habilidad empleada por los Akuma para rescatar a sus aliados. Se trata de un estrecho prisma rectangular de luz que envuelve al objetivo y lo lleva a la dimensión donde se encuentra el usuario de la técnica, haciendo que sea totalmente imposible atacarle en este estado. Cada uno de los superiores Akuma cuenta con un artefacto especial llamado Caja Negación (反膜の匪(カハ・ネガシオン), kaha negashion, literalmente "Membrana de Rechazo del Asaltante") capaz de simular los campos de fuerza de la Negación, a fin de castigar a sus subordinados, de ser necesario. La Caja Negación tiene el aspecto de un cubo que, al ser activado, lo atrapa en una dimensión alternativa de la que sólo pueden llegar a escapar los Akuma y Noés más poderosos al cabo de unas horas.
- El Cero (虚閃(セロ), sero, literalmente "Fogonazo") es el ataque básico. Consiste en el lanzamiento de una descarga de energía muy potente, generalmente de color rojo carmesí, capaz de desintegrar al objetivo. El Cero es generalmente lanzado desde la boca, pero otros personajes son capaces de lanzar estos ataques desde otras partes de sus cuerpos como las manos, los dedos o los ojos, entre otras. La fuerza, la velocidad, el tamaño e incluso el color del Cero dependerán del usuario y del poder que comunique a su ataque.
- La Garganta (黒腔(ガルガンタ), garuganta, literalmente "Cavidad Negra") es una habilidad que poseen los Akuma y los Arrancar* para moverse a través de las diferentes dimensiones, conectándolas de forma temporal a su hogar. La ejecución de la Garganta consiste en romer literalmente el espacio, revelando un oscuro tunel en cuyo interior existe una gran cantidad de energía, que se mueve en torrentes y remolinos y requiere ser canalizada y solidificada para poder crear un camino transitable.
* Máscara de protección: el daño corporal aparentemente puede ser ignorado mientras usa sus máscaras.
* Absorción del Reiryoku: Pueden absorber el poder espiritual (Reiryoku) de su entorno o lo ingieren de seres espirituales, mientras que el Shinigami produce su propio poder espiritual natural. Al combinar estas dos propiedades, los Vizard pueden reabsorber el poder espiritual que ellos mismos emiten, lo que hace a sus técnicas mucho más eficientes.
* Telequinesis: Aparentemente tienen diferentes grados de telequinesis.
* Efectos Secundarios: El único efecto secundario conocido en ponerse sus máscaras Akuma es el límite de tiempo determinado, que varía de usuario a usuario. Afortunadamente, hay un remedio a este problema: Entrenamiento (pero en qué medida se desconoce en la actualidad); La mayoría de los Vizard parecen tener un límite que va desde tres minutos hasta más de 15 horas, dependiendo del Vizard (Yoruichi puede mantenerse 15 horas a lo sumo). Cada vez se usan las máscaras, las voces de los Vizard se hacen eco, como consecuencia tanto de su voz normal y la voz de su akuma interior está hablando al mismo tiempo.
Última edición por Shihouin Yoruichi el Lun Oct 11, 2010 2:56 am, editado 1 vez
||Resurrección ||
Los Arrancar (破面, アランカル, arankaru) son los Akuma que se han retirado voluntariamente parete de su armadura o de su cuerpo y han obtenido, como contrapartida, poderes de Exorcista o Ninja como son el poder combatir también con una Zanpakutō o una espada y el acceso a una liberación de la misma mediante un proceso denominado resurrección. Al contrario que los Akuma comunes, la inmensa mayoría de los Arrancar tiene aspecto y tamaño humanoide, así como una bien diferenciada personalidad y pronunciadas emociones, hasta llegar al extremo de existir Arrancar pacíficos o de naturaleza bondadosa.
La Resurreción (帰刃(レスレクシオン, resurekushion, literalmente "Filo que Regresa") es el nombre que recibe la liberación de un Akuma. Al tratarse de Exorcistas cuyos poderes secundarios especiales son poderes de Akuma, poseen una Zanpakutō y son capaces de realizar una única liberación. Sin embargo, al contrario que las Zanpakutō de los Ninja o de los Vizard, las de los Akuma no son partes del alma del usuario, sino que se tratan de los poderes de Akuma sellados en forma de arma. Al liberar su Zanpakutō de la misma manera que los Ninja o Vizard, los Akuma simplemente recuperan sus poderes Akuma.
Debido a que sus poderes originales se encuentran sellados en sus Zanpakutō, la liberación de los Akuma no transforma su arma en algo diferente, sino los que cambian son los propios "Akuma", adquiriendo una apariencia más similar a un Akuma real, y permitiendo el uso de sus habilidades libremente. Normalmente, Arrancar (como se les nombra a la especie Akuma que sella sus poderes en una Zanpakutô) puede regresar a su forma más humana cuando vuelven a sellar sus poderes, pero en caso de perder alguno de sus miembros durante la pelea éstos no regresarán una vez se libere de nuevo. La razón de que los Arrancar sellen sus poderes responde a dos motivos básicos: les permite mantener una forma humana y conservar sus poderes en tiempos de inactividad.
En su forma sellada, la Zanpakutō de un Arrancar suele tener también la forma de katana aunque, a diferencia de los Ninja o de los Vizard, existen muchas más excepciones a esta regla, apareciendo armas selladas con muy distintas formas, alejadas del aspecto tradicional de una espada. En muchos aspectos, la resurrección es una liberación similar al "shikai" o liberación de primer nivel. Al igual que ocurre con éste, para que la liberación Arrancar sea efectiva, se debe pronunciar antes del nombre de la Zanpakutō un comando de activación.
La Resurreción (帰刃(レスレクシオン, resurekushion, literalmente "Filo que Regresa") es el nombre que recibe la liberación de un Akuma. Al tratarse de Exorcistas cuyos poderes secundarios especiales son poderes de Akuma, poseen una Zanpakutō y son capaces de realizar una única liberación. Sin embargo, al contrario que las Zanpakutō de los Ninja o de los Vizard, las de los Akuma no son partes del alma del usuario, sino que se tratan de los poderes de Akuma sellados en forma de arma. Al liberar su Zanpakutō de la misma manera que los Ninja o Vizard, los Akuma simplemente recuperan sus poderes Akuma.
Debido a que sus poderes originales se encuentran sellados en sus Zanpakutō, la liberación de los Akuma no transforma su arma en algo diferente, sino los que cambian son los propios "Akuma", adquiriendo una apariencia más similar a un Akuma real, y permitiendo el uso de sus habilidades libremente. Normalmente, Arrancar (como se les nombra a la especie Akuma que sella sus poderes en una Zanpakutô) puede regresar a su forma más humana cuando vuelven a sellar sus poderes, pero en caso de perder alguno de sus miembros durante la pelea éstos no regresarán una vez se libere de nuevo. La razón de que los Arrancar sellen sus poderes responde a dos motivos básicos: les permite mantener una forma humana y conservar sus poderes en tiempos de inactividad.
En su forma sellada, la Zanpakutō de un Arrancar suele tener también la forma de katana aunque, a diferencia de los Ninja o de los Vizard, existen muchas más excepciones a esta regla, apareciendo armas selladas con muy distintas formas, alejadas del aspecto tradicional de una espada. En muchos aspectos, la resurrección es una liberación similar al "shikai" o liberación de primer nivel. Al igual que ocurre con éste, para que la liberación Arrancar sea efectiva, se debe pronunciar antes del nombre de la Zanpakutō un comando de activación.
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